Miles de mujeres, con banderas, globos y vestimenta de color blanco, de diferentes organizaciones como profesionales, gremiales, artesanas entre otros, marcharon masivamente el viernes por la mañana, por las céntricas calles de La Paz, en rechazo del racismo, odio, discriminación y bloqueos violentos que se suscitaron durante los últimos días en varias regiones del país, en las movilizaciones alentadas por grupos de oposición.

"Somos madres, somos esposas, hijas, hermanas, queremos paz para Bolivia, no queremos que haya muertes, no queremos violencia de ningún lado, solo queremos paz, unidad, no queremos ser madres llorando hijos, no queremos ser esposas perdiendo esposos, solo queremos paz", sostuvo María Alegría, representante de las mujeres peinadoras.

Así también, esa numerosa marcha anunció que presentará una denuncia internacional por el vejamen que sufrió la alcaldesa de Vinto, Patricia Arce, el pasado miércoles en la ciudad de Cochabamba.

Participaron de la movilización mujeres gremiales, campesinas, indígenas originarias, activistas de derechos humanos, feministas, trabajadoras del hogar, entre otros sectores de féminas, que demandaron también el cese de la violencia, impulsada por sectores que desconocen los resultados de las elecciones del 20 de octubre, que dieron el triunfo al presidente Evo Morales con 47,08% de los votos.

Por otra parte la representante de las mujeres campesinas Segundina Flores indicó que en los próximos días se presentará una denuncia a organismos internacionales por los vejámenes que sufrió la Alcaldesa de Vinto y otras mujeres que fueron agredidas por un grupo de "motoqueros" en la ciudad del Valle.

A su vez la representante de las feministas comunitarias, Julieta Paredes, aseguró que pare la violencia en el país que está siendo impulsado por las clases privilegiadas que no soportan que las personas pobres, puedan gozar de préstamos bancarios, puedan comprarse su casa y puedan sentarse al lado de sus hijos en los cines, teleféricos y que hayan mejorado sus condiciones de vida.

Paredes aseguró que ese tipo de condiciones, a las que actualmente logró llegar personas de la clase humilde, de otro color de piel, es la dictadura que pregonan los sectores de oposición, asegurando que ese sector racista y bloqueador solo busca su democracia de privilegios y defender sus intereses.