El secretario Ejecutivo de los Mineros de Bolivia, Gonzalo Quispe, conjuntamente los trabajadores, celebraron este viernes los 77 aniversario de la gloriosa Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia, destacando su constante lucha contra los gobiernos dictatoriales y la recuperación reciente de la democracia el 2020, cuando a la cabeza de su líder fallecido Orlando Gutiérrez, lucharon contra la dictadura de Añez y sus ministros Arturo Murillo y Fernando Lopez.

“La gloriosa FSTMB, quienes hacen grande a esta poderosa institución (…) una lucha ante los gobiernos de dictadura y este último una lucha de los trabajadores mineros a la cabeza del compañero Orlando Gutierrez, que descanse en paz, una lucha de cara frontal a un gobierno golpista donde hemos recuperado la democracia y hemos dignificado al pueblo boliviano”, sostuvo Quispe en conferencia de Prensa.

El dirigente máximo de los trabajadores mineros, señaló que los actos protocolares acordes a la envergadura histórica de la FSTMB, se suspendieron para precautelar la salud de sus más de 60 federaciones de mineros afiliados, que corren peligro en su salud producto de la tercera ola del coronavirus.

Por otra parte Quispe destacó además, que su 77 aniversario se celebra en su propia casa, un edificio nuevo de 8 pisos, en pleno centro paceño, entregado por el Gobierno del ahora presidente Luis Arce Catacora, pero que inició su construcción durante el Gobierno de Evo Morales a la cabeza del dirigente fallecido Orlando Gutiérrez, a quien de igual forma rindieron homenaje.

No obstante señaló que al momento la lucha de los trabajadores mineros de Bolivia continúa debido a que muchos de sus afiliados fueron despedidos de sus fuentes laborales en plena pandemia durante el régimen de facto y que hasta el momento no son reincorporados a sus fuentes laborales, por lo que deben garantizar la estabilidad laboral.

Detalló que los trabajadores mineros continúan también en pie de lucha hasta que todos los responsables de las masacres en Sacaba y Senkata paguen su deuda con la justicia y sean castigados con todo el rigor de la ley, por cometer el atropello de masacrar al pueblo boliviano.