El presidente de la Federación de Empresarios Privados de La Paz, Jaime Ascarrunz, aseguró el miércoles que en el marco de las fiestas julias se ve la imperiosa necesidad de impulsar el desarrollo del norte paceño, apoyando los proyectos que sean económicamente rentables y que le cambien la vida al departamento y a la población.

“No podemos permanecer en La Paz como un lugar donde la gente se dedique a ser empleado público o a depender de alguna dependencia estatal y paraestatal, nosotros como empresarios, aceptamos el desafío de ir al desarrollo del norte paceño, aceptamos el desafío de entrar a la agroindustria y creemos que los paceños tenemos las capacidades para desarrollar estos proyectos” sostuvo a la Agencia de Noticias CCB.

El representante de los empresarios paceños, aseveró que en el caso de las represas del Bala y Chepete, obra que es bastante criticada e impedida por algunos ambientalistas, las mismas son bastante provechosas y que la energía hidroeléctrica que se generaría en esas hidroeléctricas, cambiarían la vida de La Paz, Pando y Beni.

Aseguró que esos proyectos cambiarían la economía de esos departamentos y el país, puesto que a los alrededores de las represas e hidroeléctricas, existen industrias, actividades empresariales de todo tipo, además de las actividades turísticas, hoteleras, pesca entre otros y que lo importante es reducir y minimizar el impacto al medio ambiente.

Ascarrunz aseveró que es importante impulsar el desarrollo de la ciudad de La Paz para que vuelva a liderar el desarrollo económico del país, tomando la fuerza regional y estando convencidos de que lo que se haga sea para el bien toda la población.

A su vez el representante de los empresarios privados de La Paz, aseveró que el departamento paceño se ve muchas veces afectado por la serie de controles y fiscalizaciones por parte de impuestos nacionales, que merma la actividad privada, lo que hace que muchos de los paceños migren a otros departamentos como Santa Cruz y desde ahí lideren el crecimiento de esa región.

En ese sentido aseveró que por esas políticas impositivas y fiscalizadoras, el departamento paceño se convierte en una ciudad expulsora de población, por lo que se debe tomar las riendas del mismo de manera inmediata, para no terminar en una debacle económica como se convierten varios países y ciudades expulsoras.

“Nosotros como empresarios vamos a impulsar desde todo punto de vista los estudios que sean necesarios para este desarrollo, somos emprendedores, somos gente que arriesga su dinero y que tenemos que entablar relaciones con el Gobierno”, sostuvo Ascarrunz.